Sal de mi vida.

Nunca imaginé que llegaría a ver como te vas con otra que decía ser mi amiga. Yo no quiero saber que pasó, no me cuentes cómo ocurrió, si no vas a decir la verdad no necesito saber nada más. Y ahora no me vengas pidiendo perdón, no pienso perdonaros a ninguno de los dos. No entiendo cómo pudiste hacer una cosa así, no entiendo cómo esperas que te perdone después de todo lo que sé. Ahora a ti te toca reconocer todo lo que hiciste, no lo hiciste por amor, no lo hiciste porque me querías. Tal vez esta vez has conocido a esa persona que te cuida, que te espera y que te aguanta cada día. Ahora ya es tarde, ¿por qué lo hiciste? Por mucho que insistas para mí no existes. Ahora  no importa lo que me digas, solo te pido, sal de mi vida.